Cuando finalizan los ciclos de corridas televisadas en España por haber acabado la temporada justo con las corridas de la Feria de Jaén, los aficionados seguimos buscando otras cadenas televisivas a través de Digital + con la finalidad de seguir manteniendo nuestra afición.
Y en plena función de zapping topé con una corrida que se televisaba desde Quito con un cartel interesante. Naturalmente, la ví y tomé las notas que ahora les transcribo.
¡Va por ustedes!
LO QUE VIMOS EN LA CORRIDA TELEVISADA DESDE QUITO.
Por LUIS ALONSO HERNANDEZ. Veterinario y escritor.
Toros de tres ganaderías diferentes son los que se van a lidiar esta tarde en la Plaza de Quito por la terna internacional compuesta por:
Antonio Campana (de caña y oro).
Sebastián Castella (grana y oro).
Miguel Ángel Perera (verde y oro).
Abre plaza un toro de preciosa lámina de la Ganadería de Trinidad. Ganadería que está ubicada a 3.800 metros de altura. Su procedencia es Domecq. + Núñez.
El toro no quiere nada de lidia. Está muy quedado.
Las verónicas de fijación han resultado movidas, debido a que Antonio Campana matador de 38 años, únicamente ha matado dos toros en esta temporada.
En banderillas un desastre. Con tres palos se cambia el tercio.
Para Ruiz Miguel que está de comentarista para Canal Sur televisión hay que torearlo “a media alturita”. No por alto porque se “rajaría”.
El pitón izquierdo es peligroso. Hay que hablarle para encelarlo en la muleta.
El toro distraído total.
Falta total de bravura.
Es un toro reservón
En la suerte natural entra Campana muy fácil y receta una media estocada algo caída que tumba al manso de solemnidad..
El segundo toro de este mediodía se llama FIADOR. Pesa 455 Kg y es de la ganadería de Carlos Manuel Cobo.
Es un toro cortito de pitones.
Castella lo recibe con 3 verónicas a pies juntos de las que el toro sale suelto. Tres nuevas verónicas perfectamente ejecutadas.
Para llevar el toro al caballo se organiza una capea. El toro, en su huida hacia los terrenos de nadie es capoteado por cuantos encuentra a su paso..
Con un picotazo dado por el picador que cubre puerta, al encontrarlo en su huida, se cambia el tercio.
El realizador perdía de vista al toro con bastante frecuencia.
Castella brinda al público.
Comienza con su pase cambiado. En la vuelta del toro le propina un pase por alto. Otro cambiado. Uno por alto sin moverse. Se coloca entre los dos cuernos y le provoca para dar otro cambiado. Dos trincherazos y dos redondos muy lentos ajustándose a la endeble y cansina embestida del cornúpeta.
Tres redondos lentos son rematados con el de pecho sin enmendarse y aguantado un parón del toro.
Molinete lento y dos redondos lentisimos. Sigue por redondos lentos y bajos en una serie de 4 que remata con el de pecho lentísimo.
Naturales que resultan enganchados porque por ahí no templa en la cercanía en que esta toreando. Es desarmado finalmente.
Sigue por naturales. Ahora mejores.
El viento hace su aparición. Sopla con fuerza.
Castella da una serie de circulares invertidos en el centro del ruedo a un toro que quiere irse. Sigue por redondos. Nuevos circulares invertidos y el toro se raja definitivamente.
Tras tomar el estoque de matar, ejecuta una nueva serie de circulares invertidos y naturales, bien ligados a base de arrimarse y ganar un tiempo al pase.
La suerte de matar trabajosa.
En la suerte contraria, receta una estocada ligeramente desprendida que no obstante penetra hasta las péndolas que no hace doblar al toro con prontitud por estar un poco tendida.
El matador extrae la espada primero con el estoque de descabellar y luego con la mano y el toro barbeando tablas parece que se va a echar pero sigue caminando y esto dificulta que pueda descabellar
Castella que está muy seguro en todo cuanto realiza, acierta a la primera vez que intenta el descabello.
Leve petición de oreja. Que el presidente ni se plantea conceder.
Castella se va tan contrariado por no haber podido triunfar en este toro que se enfada ostensiblemente con el que pretende entrevistarle.
Saluda desde el tercio.
El tercero de la corrida tiene por nombre PELEON. Su capa: colorao. Pesa 506 kilos. Es de la ganadería de Trinidad (Nuñez+ Domecq). Tiene unos cuernos que son dos “platanitos”.
Miguel Angel Perera, lo recibe por verónicas sin estirarse.
Otro toro que de momento no se emplea.
En la suerte de varas: Entra rebrincado al caballo tordo y sale suelto totalmente. Nuevamente entra al caballo y sale suelto. En la suerte de la aceituna le pica y se queda con el toro. Da un buen puyazo. Se cambia el toro.
En banderillas: Dos pares de banderillas normalitos. Hay expectación por ver poner banderillas al lerdo en ello, el Tortuga que entra sin cuartear y sin saber salirse de la suerte.
En la suerte de muleta, el toro mide mucho al torero, sobre todo por el pitón izquierdo.
Comienza por redondos en dos series donde el peligro es patente.
El toro no quiere pelea y cuando le acosa el matador se muestra peligroso.
En medio de un ventarrón le da una serie de naturales de gran mérito. Finalmente al rematar con el pase de pecho es desarmado.
En la suerte contraria le propina una estocada trasera y desprendida debido a que el toro no se fijaba en la muleta.
Y ahora tras doblar el tercer toro, justo a la mitad de la corrida hay la parada que se denomina EL ALMUERZO, puesto que la corrida se da a la una y media de la tarde para evitar las lluvias de la tarde.
El cuarto toro de la tarde es otro colorado acapachado que sale con más ánimos que los compañeros anteriores.
Lo recibe Antonio Campana con una larga cambiada de rodillas en el terreno de dentro de las dos rayas. Sigue con verónicas con el paso atrás. Remata con una serpentina.
En un descuido por parte de los lidiadores, el toro se va directo al caballo. El picador, aunque muy delantero, logra agarrárse con él. Se cambia el tercio con un puyazo.
El toro se queda sin fuerzas.
El matador realiza un quite por chicuelinas. Tres buenas.
Banderillas: un primer par excelente de Eduardo Ceballos. José Cortés también parea bien.
La faena de muleta empieza por ayudados por alto, ofreciendo mucha muleta.. Sigue por naturales que comienza ayudándose, Ahora por redondos que no liga y no remata.. Vuelve al natural pero no deja la muleta en el sitio y por ello no liga los muletazos. Ahora lo intenta y llega casi a lograrlo pero falta algo. Ahora lo intenta con pase por alto de rodillas que no logra. Lo intenta nuevamente cuando el toro no quiere embestir. Finalmente se raja del todo.
Posiblemente había desaprovechado un toro que en otras manos hubiera servido.
En la suerte contraria pinchó arriba. A la segunda, también en la suerte contraria, logra una gran estocada que hace doblar al toro.. El puntillero acaba con la vida de otro toro manso también.
CASTELLA EN SU SEGUNDO, QUINTO DE LA TARDE.
Negro de capa. 450 kilos ESPUMOSO de nombre y bizco del izquierdo. Su encaste (Núñez + Guateles).
Castella lo recibe con una verónica por bajo doblando la rodilla. El toro se le frena y el se rie, cuando el peligro había sido eminente..
Buenas verónicas rematadas con la media superior. Lentas y con las manos muy bajas.
El astado muestra pocas fuerzas.
En varas un picotazo delantero que el toro acusa rebrincándose.
Comienza una tormenta como si quisiera ver la faena de Castella.
Arrecia la lluvia ecuatoriana que tampoco quiere perderse la gran faena que se avecina.
Castella se sienta en el estribo y le pega un magnífico pase por alto. Se queda sentado en el estribo esperando a su colaborador. Como no viene, se levanta y se va a por el toro que se hace el remolón..
Un redondo, una trinchera. Repite lo mismo. Dos redondos y remate con el de pecho sin enmendarse. Muy tranquilo Castella por derechazos. Cinco extraordinario, ligados y rematados con el de pecho aguantando el parón previo. Molinete, tres derechazos. Martinete y remate con el de pecho. El toro colabora. Cuatro naturales rematados con el de pecho. Todos superiores.
Cuatro nuevos redondos y el de pecho. Perfectamente ligados. Circular invertido quedándose estático para adornarse con el teléfono.
Hace el péndulo. Circular invertido completísimo. Lo mismo por redondos. El toro se para y él lo aguanta. Nuevo circular invertido. Asusta al toro.
Va a por la espada de matar. Sigue con molinete. Pase de las flores. Pase de pecho. Se le queda el toro y le hace cambiar la trayectoria.
En la suerte natural, perfecta estocada entera. Dobla el toro.
Castella se va al centro de la plaza para saludar al respetable.
El Presidente le concede las dos orejas.
MIGUEL ANGEL PERERA EN EL ULTIMO.
El ultimo toro de la corrida, corresponde a Perera.
Se llama RIGUROSO. Pesa 485 kilos. Negro de capa. Casi cornipaso de cuerna. Su ganadería es Guardaguasi.
De capote no hace nada Perera, pues el toro no humilla. Se arranca de largo al caballo y el piquero le da un buen puyazo. Por su cuenta el toro se arranca de nuevo y recibe otro picotazo, si bien el piquero no aprieta a instancias del matador.
Banderillas: Juncal casi es cogido en el primer par. El Tortuga, vuelve a pasarlo mal en el segundo par.
La faena la comienza con un pase cambiado que repite tras un pase por alto. Cinco redondos rematados con el de pecho. Ligados y perfectos.
Otra tanda de cinco con dos de pecho uno de ellos largo de verdad.
Naturales: Dos. Desarmado en el segundo.
Arrecia el viento. Nuevamente tres, rematados con el de pecho perfecto. Nuevamente cinco y el de pecho. Es un toro con recorrido y ofensivo con una cornamenta también ofensiva. Circular invertido y ahora un redondo completo también. Nuevo circular invertido y nuevo redondo completo. El toro está dominado por completo, pero aún conserva fuerza y ganas de embestir y Perera lo aprovecha dando unos preciosos y precisos naturales que además los liga. Torea con la muleta barriendo la arena oscura del coso quiteño.
Perera no se cansa, porque quiere dejar claro que él también es una figura del toreo, una figura tan refulgente como su antecesor en el triunfo, Castella. Que también tiene un valor sereno, y que sino compone la figura con tanto desmayo, torea con tanta o más verdad que el francés.
Después de una magnífica tanta de naturales, rematados con ese pase doble de pecho que ahora se ha impuesto tras ponerlo en escena hace algunas temporadas Jesulin de Ubrique, se encamina a barreras para recoger el arma mortífera y brillante, vuelve a la faena con unos redondos perfectos seguidos de unos naturales que son rematados con el, ahora no obligado, de pecho.
Unas manoletinas dadas de frente y tomando la muleta por el centro, son el preámbulo a una estocada perfecta en ejecución y colocación que tumba al toro sin puntilla
Los tendidos se entusiasman y piden las dos orejas que la presidencia concede.
Han empatado a trofeos los dos jóvenes y prometedores toreros que sonarán con fuerza en la próxima temporada y han demostrado que saben torear a los toros que se empleen un poquito.
Las conclusiones que hemos sacado tras visionar la corrida son:
1.-Los toros no mejoran su bravura con la altura. Pues a pesar de los 3.800 metros los toros dejaron mucho que desear.
2.-Que el maestro Ruiz Miguel, siguió impartiendo ciencia taurina en tierras ibero americanas.
3.- Que quien lo llevó como colaborador a esas tierras con Canal Sur Televisión, no “pierde puntada” para anunciar su programa de Toros para Todos.
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