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domingo, 27 de junio de 2010

LA NOVILLADA DE LA FERIA DE ALGECIRAS 2010.



Por LUIS ALONSO HERNÁNDEZ. Veterinario y escritor.







Salvador Barberán ( blanco y oro), David Galván (blanco y oro) y el debutante con caballos Miguel Ángel Sánchez (obispo y oro)



Sale el primero. Número 24. 430 kilos. Negro. No remata en el burladero de salida. Si lo hace al ser llamado por segunda vez.



Salvador Barberán lo recibe por verónicas en serie de cuatro que remata con una media sobre el pitón izquierdo doblando con la realizada sobre el pitón derecho.



El toro tiene un buen tranco demostrado cuando lo ha llevado su matador con lances por delante sin cruzar al caballo de picar.



Cuando entra al caballo, tras ser estimulado por los sones del estribo agitado por el piquero, cabecea y demuestra escasez de fuerzas.



Barberán hace su quite por delantales en serie de tres que remata con la media verónica. Se cambia el tercio.



En banderillas se lucen los banderilleros en pares de buena ejecución si bien alguno no tiene la colocación adecuada.



Barberán tras brindar al torero Ruiz Miguel, que ocupa burladero del tendido tres, comienza su faena doblándose sobre ambos pitones para seguidamente instrumentar un redondo y, tras cambiar la muleta de mano sobre el mismo pase, rematar con el pase de pecho sobre la mano izquierda.



Fuera de las dos rayas, serie de cuatro redondos que, tras cambio de muleta por la espalda, remata con el pase de pecho sobre la zurda.



Ahora en “torear sin torear”, deja que el toro repose.



Con el novillo en la misma boca de riego, Barberán se lleva la muleta a la mano izquierda. Dos naturales rematados muy largo. En el tercero el novillo pierde las manos. Nueva toma de distancia. Naturales en los que le manda muy largo y en serie de tres que remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda.



Comienza sonar la música. Le da distancia. El novillo escarba. Barberán con la muleta en la mano izquierda. Una serie de cuatro buenos naturales mandándole mucho al novillo en el remate que abrocha con el pase de pecho sobre la mano izquierda.



Tres buenos naturales en los que también despide mucho al novillo. Tanto que ha de volver a tomar distancia para seguir toreando sobre la mano izquierda. Remata con un afarolado al que sigue el pase de pecho sobre la mano izquierda.



Barberán ha dado unos buenos naturales que no han llegado al público por falta de transmisión por parte del novillo y por exceso de facilidad en la ejecución de los mismos por parte del cuajado novillero.



Muleta en la mano derecha. Dos excelentes redondos a un novillo de clase excepcional por su nobleza y afectividad de embestida. Ha terminado con un pase natural ayudado. Recibe una ovación.



Serie de tres trincherazos-molinetes. Un invertido. Trata de repetir la suerte pero el novillo se ha cansado de embestir debido al exceso de muletazos.



Sigue Barberán por redondos buenos donde le anda muy bien ante la cara de su oponente, que remata con un trincherazo y un pase de pecho sobre la mano izquierda.



Se lleva ahora la muleta a la izquierda. Da unos buenos naturales que como los realiza con suma facilidad y utilizando el pico no llegan a los tendidos. Finaliza la faena con unos ayudados por alto.



En la suerte natural y entre las dos rayas entra a matar a un distraído novillo. Pincha arriba. Encuentra hueso. El estoque que no ha profundizado es escupido. El astado se ha ido a los medios y allí en la suerte contraria vuelve a pinchar.



En la suerte natural entre el tendido 3 y el 5 logra una buena estocada en el momento en que suena un aviso. El novillo se acula en tablas. Intenta descabellar. El puntillero lo levanta. Barberán falla el primer golpe de descabello. Suena el segundo aviso. Vuelve a fallar con el verduguillo por dos veces acertando finalmente al cuarto intento.



Unas tibias palmas le conminan a que salga al tercio a saludar y Barberán lo hace.







Sale el segundo. Número 33. Castaño de capa.



David Galván saluda al novillo por verónicas en las que como no le gana terreno resulta apretado. Cuando se sale a las dos rayas administra un coctel de lances; verónicas, tafalleras, medias verónicas, sin cadencia y sin justura.



El novillo se va al burladero del tendido 8 en plena solanera, mientras David Galván se sitúa en el centro del ruedo en espera de que los piqueros ocupen los lugares reglamentarios. Desde allí con pases por delante sin cruzar lleva al distraído novillo al caballo de picar.



Cuando, sin ganas, entra al caballo, romanea incluso, apretando sin cabecear pero sin convicción alguna. El picador en suerte desastrosa no es capaz de colocar la puya arriba a pesar de que está en “suerte de la aceituna”. Finalmente sacan al novillo cuando está apretando al caballo en los medios.



Galván quita por chicuelinas, en serie de tres de las cuales la primera fue buena y las dos restantes resultan enganchadas al igual que la larga a una mano de remate.



En banderillas el novillo sin fijeza aprieta a los banderilleros que dejan un solo palo en cada entra. Finalmente el primero deja los dos arriba con lo que se cambia el tercio.



Brinda al público. Lanza la montera que cae boca arriba y la voltea con el estoque simulado.



Comienza doblándose por ambos pitones, y remata con un pase de pecho sobre la mano derecha.



Un redondo gustándose y distanciándose mucho del novillo lo recibe con redondo donde le da un trallazo al igual que en el segundo. Dos buenos redondos que remata con el pase de pecho sobre la derecha.



Serie de tres nuevos redondos que remata con el doble pase de pecho empezando por el realizado sobre la mano derecha.



Nueva serie de redondos fuera de cacho que remata con el de pecho sobre la mano derecha. Sigue por redondos donde en el remate manda muy largo al novillo. Al no hacerlo en la cadera no llega al público aficionado. Remata con un pase de pecho sobre la mano derecha.



Un ayudado con la mano izquierda. Un natural. En el siguiente pierde más pasos de los debidos porque no ha querido ligar. Nuevo natural en que pierde tres pasos. Nuevo natural y como se queda en el sitio el toro le da un derrote que está apunto de echarle mano.



Dos naturales sin ajuste alguno, que remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda.



Redondo sin ajuste puesto que el novillo se queda muy corto y trata de rematar con el pase de pecho sobre la mano derecha que no le sale porque le pisa la muleta y lo desarma.



Un ayudado, un pase de pecho sobre la mano izquierda. Dos ayudados más un pase de pecho atropellado. Dos ayudados más y remata con el pase de pecho aprovechando el viaje del novillo.




En la suerte contraria estoconazo hasta los gavilanes. El público muy receptivo comienza a sacar pañuelos de manera mayoritaria y el presidente concede el trofeo. El toro es aplaudido en el arrastre.







El tercero tiene un peso de 435 kilos es el número 26. Negro ensillado que luce la divisa en la parte final de los lomos. ¡El encargado de ponerla se ha pasado “tres pueblos”!



Miguel Ángel lo recibe con una larga cambiada en el tercio por el pitón derecho. El novillo se da una vuelta al ruedo.



A la vuelta una serie de cuatro verónicas sin ajuste, que trata de rematar con una media verónica que no le ha salido.



Novillo llevado al burladero de suerte del tendido 8 en espera de la colocación de los picadores en sus lugares correspondientes.



Desde el centro del ruedo lleva bien al novillo al caballo de picar con capotazos templados. El picador lo estimula con sonidos del estribo. El astado se arranca. Aprieta sin cabecear metiendo los riñones. El público protesta el castigo a que lo somete el piquero. Lo saca Corruco.



Miguel quita por verónicas en serie de dos que trata de rematar con una revolera que resultó sucia porque el novillero no jugó bien los brazos y el novillo perdió las manos en el embroque.



Miguel Ángel Sánchez toma las banderillas que brinda al público siendo correspondido con la ovación pertinente.



El primer par es bueno si bien colocado a novillo pasado. Nuevamente vuelve a colocarse en el mismo lugar, el novillo está en el mismo sitio y va a entrar por el mismo pitón. Se nos antoja demasiado peligroso. Efectivamente es empitonado. La gran suerte de que en el momento de ser empitonado el novillo se cae. El tercer par lo coloca muy cerrado en tablas ambos contendientes. Al quiebro resultando cogido nuevamente.



Miguel Ángel brinda al señor Alcalde de Algeciras que sale al tercio a recibir el brindis de manera antirreglamentaria.



La faena la comienza doblándose por ambos pitones y luego con una serie de muletazos lo saca fuera de las dos rayas. Se distancia mucho. Cita con la muleta portada en la mano derecha. Un pase de pecho sobre la mano derecha. Sigue por redondos en serie de tres que remata con el pase de pecho sobre la mano derecha. Aplausos.



Dos buenos naturales que remata con una trinchera. En el mismo centro del ruedo intenta dar unos naturales en los que ni ha mandado ni templado ni rematado. Abrocha con el pase de pecho sobre la mano izquierda.



Muleta en la derecha. Intenta dar una serie de redondos que no ha logrado. Finalmente remata con un excelente pase de pecho sobre la mano derecha de los denominados de pitón a rabo. ¡Lo mejor de su labor muleteril!



Un natural ayudado en que el novillo le pone los pitones en el cuello. Insiste Miguel Ángel en misión peligrosa puesto que el novillo al no ser mandado le pone los pitones en el cuello en el remate de los pases.



Con la muleta sobre la mano derecha logra una serie de redondos buenos de mano baja que remata con el pase de pecho sobre la mano derecha. La nueva tanda resulta enganchada. Finalmente remata con el pase de pecho sobre la izquierda a la salida del cual el novillo se va a chiqueros.



¡Miguel Ángel, desde mi punto de visto equivocadamente, ha estado toreando casi delante de chiqueros que no es el terreno ideal!



En la suerte natural, pinchazo arriba sin soltar. En la nueva entrada excelente estocada atravesada de la que el novillo dobla. Se pide la oreja que el presidente concede. Da la vuelta al ruedo y lo que no se debe hacer. ¡Cambiar el capote y la montera por un bebé de unos añitos con el que da la vuelta al ruedo!







Sale el cuarto de la tarde. Número 17. 474 kilos de peso. Es un torito precioso de lámina.




Salvador lo recibe por verónicas ganándole terreno y en el centro del ruedo continúa con dos chicuelinas y remate final con la media verónica que dobla con otra sobre el otro pitón. Ovación.



El piquero marra estrepitosamente para luego, tras agarrarse tapar la salida al novillo.



Barberán quita por tres chicuelinas buenas que remata con una media verónica.



En banderillas se luce Víctor Nieto en dos buenos pares que le permite el destocado.




La faena la comienza por redondos en serie de tres toreando con el pico de la muleta. El novillo se para. Le toma nuevamente la distancia para seguir por redondos de pico que remata con el pase de pecho sobre la mano derecha.



Ahora logra una buena serie de redondos que remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda. Comienza sonar la música. Torear sin torear con la muleta plegada sobre el antebrazo izquierdo.



Unos redondos jaleados por el público. Dos redondos ligados, un cambio de mano sobre el mismo pase, dos naturales y remata con el pase de pecho sobre la izquierda. ¡Ahora Salvador ha mandado templado y rematado los pases!



Muleta en la izquierda. Un natural echándole fuera. Otro en el que el novillo le gana el terreno. Siguen más naturales en los que abusa del pico de la muleta al tiempo que lo vacía en el remate para afuera con lo cual los pases no llegan al público.



Muleta en la derecha. Dos redondos despegados. Un martinete y remate con el pase de pecho sobre la derecha doblando con el de la izquierda.



Deja oxigenar al novillo. Un pase de las flores para seguir al redondo. No torea con la bamba de la muleta. ¡Pico mucho pico!, en medio de los sones de la música. Más redondos con el mismo defecto de ejecución.



Busca la igualada doblándose con el novillo. En la suerte contraria pinchazo arriba que el toro escupe. En la suerte natural entre las dos rayas, pinchazo arriba sin soltar. Sus paisanos le estimulan con aplausos. Al cuarto intento, en la suerte natural, logra una entera ligeramente desprendida. Capoteo de los subalternos. El novillo dobla entre los tendido 2 y 4. El puntillero lo levanta. Suena un aviso.



Cuando finalmente es arrastrado, una ovación del público le anima a que salga al tercio a saludar. Barberán da la vuelta al ruedo en medio de la complacencia de sus paisanos.







El quinto 13 450 kilos. Un novillo muy fino que de salida remata en el burladero del cuatro.



Galván lo recibe con tres verónicas que resultan enganchadas en el remate.



El novillo se da una vuelta al ruedo y a la vuelta, el novillero le administra unas buenas verónicas ganándole terreno y remata con una revolera.



Novillo llevado al burladero de suertes. Desde allí lo lleva, con lances por delante sin cruzar, al caballo de picar dejándolo en suerte con un recorte muy torero. El piquero se agarra caído para rectificar sobre al marcha al tiempo que lo tapa la salida. El novillo aprieta.



Galván quita por tafalleras afaroladas en serie de tres que remata con una larga a una mano.



Se cambia el tercio siendo aplaudido el piquero cuando abandona el ruedo. ¡No entendemos esta decisión del público!



En banderillas se luce Duarte que al colocar dos excelentes pares le permiten el desmonterado.



Comienza a soplar el levante.



Galván brinda a los ganaderos incluyendo al hijo de Curro que también salen al tercio a recoger la montera.



Comienza su faena por estatuarios en serie de cuatro. Fuera el novillo de las dos rayas remata con un pase de pecho sobre la mano izquierda.



Gustándose con la muleta plegada sobre la mano derecha se acerca al novillo para instrumentar una serie de tres buenos redondos que remata con un pase de pecho de los denominados de pitón a rabo.



Con los sones del pasodoble Martín Agüero buena serie de de redondos, el último de los cuales resulta enganchado. Remata con el pase de pecho sobre la mano derecha. Dos buenos naturales que remata con un pase de pecho en el que no ha sabido medir bien la distancia y ha estado a punto de ser cogido. Sigue con la muleta en la izquierda. Naturales en los que abusa del pico de la muleta. Desplante.



Un invertido. Remata la faena con unas espaldinas que tanto prodigaba Miguelín.



En la suerte contraria y entre las dos rayas, entra a matar. No hace la cruz y pincha arriba. Vuelve a cuadrar al novillo. En la suerte natural nuevo pinchazo arriba. Suena un aviso. En la suerte natural estocada trasera y tendida. El novillo dobla. El puntillero lo levanta. Muy herido, dobla nuevamente y nuevamente lo levanta el puntillero. Galván ha de tomar el descabello para acertar al segundo intento.



Cuando el novillo es arrastrado Galván recibe una ovación.







Sale el último de la tarde. Número 22. 470 kilos. Negro de capa.



Miguel Ángel lo recibe por verónicas y trata de rematar con una media en laque el novillo se le cuela peligrosamente. En el segundo intento tampoco lo consigue.



Un novillo con mucho genio que incluso derriba al piquero porque no se quedó con él en la suerte de varas. Un monosabio colea al novillo.



Miguel Ángel quita por chicuelinas en serie de tres buenas y remata con una revolera.




Banderillea el matador Miguel Ángel toma dos pares de banderillas ofreciéndole uno a Corruco. Pone un buen par con la mala suerte que el novillo pierde las manos en el embroque. Corruco parea con efectividad y cierra tercio Migué Ángel con un excelente par. Saludan ambos toreros desmonterándose Corruco.



La faena la comienza por redondo en los medios. Dos redondos en el segundo de los cuales Miguel Ángel resulta achuchado.



Muleta en la izquierda. Fuera de cacho logra tres naturales ligados que remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda. Ovación.



Una faena deslavazada porque en realidad no sabe lo que va a hacer. Finaliza su faena con unas manoletinas. ¡Es su debut con picadores!



A la altura del tendido 4 busca la igualada. En la suerte contraria y entre las dos rayas, mete la mano con habilidad a un novillo distraído y logra una estocada arriba atravesada. Suena un aviso. Toma el descabello acertando al sexto intento.