LA FIESTA DE LOS TOROS CONVERTIDA
EN UN BODEVIL.
Por LUIS ALONSO HERNÁNDEZ.
Veterinario y escritor.
Todo ha surgido por esa lucha de las televisiones autonómicas, por ver cual de ellas aportando
innovaciones - pocas en tecnología - se lleva el "gato al
agua" en aumentar
audiencias y con ello "parné" con
el que pagar a los numerosos "funcionarios"
metidos a dedo
en este circo a que han llevado a las corridas de toros.
Hubo un momento en que una cadena
privada (qué está en la memoria de todos) se puso con su tecnología de última generación a la cabeza del
ranking, pero sus luchas internas por ver quien llevaba la dirección
y ,sus ansias desorbitadas de ganar dinero la llevó a la caída
estrepitosa hasta su desaparición.
Después volvió a tratar de reaparecer
pero, como nunca segundas partes fueron buenas y, máxime cuando los
abonados se sintieron engañados, comenzaron a darse de baja y
buscaron servidores "piratas" más ajustados a sus
economías, para seguir viendo lo que el Estado no fue capaz de
llevar en abierto a los hogares de españoles amantes de su FIESTA
MÁS NACIONAL cómo siempre fue considerada.
Se desencadena una lucha feroz por
ver quien se hace con las riendas de este negocio y, como no se
tienen las ideas claras, se buscan "nuevos caminos" de
realización televisiva que llegan a invadir la parcela privada de
los toreros que siempre fue misteriosa en su afán de conservar el
mito de "jugarse la vida ante un cornúpeta con más o menos
arte".
También por "la pasta", surgieron "críticos caducos y desfasados"
quienes, apoyados por "otros aficionados"
que ejercen en cadenas de radio aportan sus opiniones taurinas como
si estuvieran en posesión de la verdad taurina absoluta cuando, sus audiencias han caído
en el ratio de audiencia.
¡Todo por la pasta! Es el lema
que ahora impera por doquier menos en este blogs que, ahora están
leyendo, que nunca ha pedido un céntimo por ofrecer a sus lectores
un detallado relato al segundo, de lo acontecido en la corrida,
aportando fotos, de más o menos calidad, en un trabajo de
periodismo altruista donde muchas horas de trabajo quedan plasmadas
en las extensísimas narraciones segundo a segundo que tanto gustan a
los aficionados de "más allá de nuestros lares" como,
a veces me hacen llegar a través de sus email para que siga en esa
línea de narrar.
Telemadrid se unió a este quehacer y,
por primera vez en la historia de la tauromaquia, ha retransmitido en
directo una Feria Taurina completa de San Isidro 2025, si bien los
televidentes de otras regiones de España se quedaban sin ver la
corrida cuando a la hora de la siete de la tarde que coincidía con
el comienzo de la corrida, la cadena Telemadrid pasaba a emitir otro programa de "madrileños
por el mundo" que nada tenía que ver con el tema toros.
Los reporteros aficionados enviados
por Telemadrid a cubrir ese espacio en las retransmisiones taurinas,
hacen caso omiso de la intimidad de los diestros e incluso, uno de
ellos se introduce en la furgoneta del matador de toros Manuel Escribano y, le acompaña
hasta el aparcamiento de Las Ventas. con el firme convencimiento de
"haber descubierto la pólvora"
Todo este deterioro desemboca en que el ritual sagrado de la fiesta se" va al
traste".
Los matadores que han conseguido
llegar a un escalón alto del escalafón taurino pierdan su humildad,
se "vengan arriba" ,se supervaloren y, como
ya no tienen necesidad de demostrar que quieren llegar, "aflojen"
en sus actuaciones públicas, expongan menos y, sean rebasados
fácilmente, por aquellos que sí tienen "hambre
de triunfos" para llegar a desalojarlos del
escalafón.
Es la ley de la supervivencia cuando
unos "no tienen nada que perder" mientras otros "si
pierden todo lo conseguido"
Ello conlleva a que, cada vez más,
triunfen matadores "recién salidos del cascarón"
cuando alternan con "figuras consagradas"
que, no obstante siguen toreando, al formar parte de trust taurinos
consolidados que, ofrecen tarde tras tarde, "más de los
mismo" a los "paganinis de entradas" quienes ,van
poco a poco dejando de creer en ellos.
Los dineros cobrados por los matadores
de una corrida de toros va en baja progresiva y alarmante.
Tanto que, han convertido a los subalternos, en los verdaderos
"ricos de la tauromaquia" al
cobrar unos honorarios fijos, pero seguros, que poco a poco van
llenando el saco de sus "ahorros taurinos"
En los ciclos de Ferias consolidadas,
las plazas suelen llenarse por aficionados "lerdos en la
materia" que han sido ganados merced a abonos favorecidos
económicamente.
No es "oro todo lo que
reluce en nuestra Fiesta"
a pesar que seamos los españolitos de siempre quienes
sufraguemos a nuestras televisiones autonómicas.
¿Cuento durará esta farsa?....El
tiempo que interese a los gobernantes políticos de turno.