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martes, 20 de octubre de 2009

LA CORRIDA DE PARLADÉ EN FERIA PILAR 2009.

Por LUIS ALONSO HERNÁNDEZ. Veterinario y escritor.

La corrida de hoy se había anunciado en los carteles primitivos así:
Toros de Parladé para Manuel Díaz “El Cordobés”, Daniel Luque y Miguel Tendero.
Posteriormente por lesión de los dos últimos espadas se lidió así:
Toros de Parladé para Julio Aparicio (grana y azabache), Manolo Sánchez (verde botella y oro) y Manuel Díaz “El Cordobés”.
Diestros que hacen el paseíllo ante la presidencia que ocupa el Sr. Pasamontes.

Sale el primero de la tarde. Número 114. Feucho. 508 kilos de peso. Tostado chorreado.
De salida remata en el burladero.
Desdeña el primer capotazo de saludo que le ofrece Julio Aparicio y sale suelto.

A la vuelta, Aparicio lo lancea por verónicas en una serie de cuatro, que remata con unas medias verónicas por ambos pitones. Ovación.
El encargado de picar es Juan Carlos Sánchez a cuyo caballo lo lleva Aparicio con lances por delante sin cruzar, y remata por arriba ante un toro que no quiere acudir al caballo. Cuando finalmente lo hace, el piquero se agarra delanterito y arriba. El toro aprieta en el primer momento, para seguidamente levantar la cara tratando de quitarse el hierro, denotando su poco raza. El piquero tampoco lo pega.
Aparicio con dos capotazos por arriba tratando de levantarle la cara, lo lleva nuevamente al caballo. El piquero se limita a señalar el puyazo. El toro se ha venido abajo del todo.
En banderillas, Ángel Otero prende un buen par a pesar de que el toro pierde las manos en el momento del embroque. David Díaz “Llaverito” deja las dos arriba y cierra tercio Otero con un extraordinario par a pesar de que el toro levanta la cabeza en el momento del embroque. Recibe una gran ovación y se desmontera.

Julio Aparicio comienza la faena vaciando al toro por arriba en pases donde predomina la estética.
El toro no quiere embestir quedándose quieto en la raya de picadores mirando al tendido. Julio rodea al toro hasta que encuentra el sitio que busca para continuar por redondos. Tres buenos redondos a media altura, que remata con un pase de pecho sobre la mano derecha.
Sigue sobre la derecha en una tanda de cuatro buenos redondos que remata con el de pecho sobre la mano derecha. Es aplaudido.
Con la muleta en la zurda. Buenos naturales a media altura que remata con una trinchera en la que el toro lo desarma.
Sigue sobre la izquierda en tanda de tres naturales. Al tercero lo vuelve a desarmar. Julio enrabietado se va a la barrera a recoger una nueva muleta y al llegar al toro lo vacía con un pase de pecho sobre la mano izquierda.
¡Un toro noble con absoluta falta de fuerzas, lidiado por un torero artista!
Julio sigue toreando por redondos muy suaves a media altura, templados, ajustándose a la lentísima embestida del toro que remata con un molinete.
Tras cambiar el estoque, en la suerte natural y entrando muy derecho, logra una estocada arriba, casi entera, que tumba al toro sin puntilla y recibe una gran ovación.
Saluda desde el tercio cuando el toro es arrastrado.

Sale cuarto de la tarde que corresponde al segundo de Julio Aparicio. Es el número 89. Varapalo. 582 kilos. Colorado chorreado, del 12/04.
Julio Aparicio lo recibe por verónicas que resultan enganchadas en el remate. Remata con una media verónica.
Con pases por delante sin cruzar, lo lleva al caballo de picar. El piquero Javier Sánchez se agarra trasero y caído, pero no rectifica ya que el toro está apretando.
Tras sacarlo del caballo el peón Juan Otero, Aparicio lo lleva nuevamente al caballo con lances por alto a la finalidad de levantarle la cara. Lo deja fuera de las dos rayas y cuando se arranca, el piquero se agarra perfectamente arriba y lo pega. Tras sacarlo nuevamente el peón, se cambia el tercio.
En banderillas con lidia de Juan Otero parean, Rafael González quien clava arriba. David Díaz “Llaverito” las deja arriba y cierra González con un solo palo arriba porque ha debido fallar el arpón de la banderilla caída, de lo que se lamenta el banderillero.
Julio Aparicio brinda al público y recibe la ovación pertinente.
Desde lejos cita al toro por redondos. Se arranca y Julio lo aguanta. Dos más. Al tercero pierde las manos y remata con un pase de pecho sobre la mano izquierda.
Da distancia al toro y, con la muleta portada sobre la mano derecha, administra tres redondos que remata con un trincherazo al que sigue un molinete.
Todos los pases a media altura por lo que no lucen, pero Julio no ha se atreve a bajar la mano ante la falta de fuerzas del toro.
Con la muleta en la izquierda logra unos naturales en serie de tres que al no salir limpios le invita a que siga sobre la mano derecha.
Con la muleta en la derecha logra una serie de redondos buenos que remata con desplante torero tocándole el pitón derecho con la mano izquierda.
Tres naturales en las cercanías, aguantando, y remata con un pase de pecho sobre la mano izquierda. Ovación.
Unos pases por alto de ejecución elegante le predispone para ir a por el estoque de matar.
En la suerte natural estocada en lo alto de la que el toro dobla.
Cuando el toro es arrastrado la ovación lleva a Julio Aparicio al tercio para agradecerla.



Sale el segundo de la tarde. Número 64. Andaluz. Pesa 571 kilos. Su capa, negra. Luce el hierro de Parladé.
Manolo Sánchez se estira en la primera verónica para seguidamente torearlo por la cara ensenándole a embestir.
Hay ligeras protestas en un sector del público por la falta de fuerza del toro.
El toro se arranca improvisadamente al caballo y Pedro Iturralde se agarra trasero para rectificar de inmediato. Seguidamente levanta el palo. Hay palmas de tongo en el público. En la segunda entrada del astado al caballo Iturralde se agarra perfectamente arriba limitándose a señalar el puyazo. Lo saca Juan Martín Soto y el presidente cambia el tercio.
En banderillas con lidia de Juan Martín Soto parean, Félix Navas que deja el par arriba. Raúl Gómez “El Pela” clava en buen sitio y cierra Navas con un par arriba que es aplaudido. Juanín (como se le conoce en Valladolid a Martín Soto), cierra al toro en el burladero de suertes.
Manolo Sánchez se va a por el toro, comenzando la faena por alto a pesar de lo cual el toro en el segundo muletazo pierde las manos.
Manolo con un pase contrario lo saca fuera de las dos rayas y con la muleta portada en la mano derecha le administra cuatro excelentes redondos templados y a media altura, que remata con un pase de pecho sobre la mano derecha.
Da distancia al toro. Muleta en la mano derecha. Cuatro excelentes redondos a media altura que, tras cambio de muleta por la espalda, remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda.
¡Una faena realizada con gran pulcritud!
Continúa toreando sobre la mano derecha en una serie de cuatro excelentes redondos en los que ya ha bajado más la mano y, tras cambio de muleta por la espalda, remata con el de pecho sobre la izquierda.
Muleta a la zurda. Lentamente, para darle tiempo, se va acercando al toro. Ya en las cercanías a base de insistencia logra una serie de cuatro naturales aislados, que remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda.
¡Manolo haciendo de enfermero!
Tras dar tiempo al toro. Se va acercando a él con la muleta portada en la mano derecha y, cuando se arranca, le saca un molinete para quedar colocado ante el toro para el al redondo. A fuerza de aguantar y tirar del toro, logra una serie de tres redondos que remata con el pase de pecho sobre la mano derecha.
El presidente que no accede a que suene la música a pesar de la petición repetida del público.
Metido materialmente entre los pitones, logra dos redondos casi completos.
¡Muy valiente y muy artista Manolo Sánchez!
¡Enorme Manolo Sánchez que recibe una gran ovación del público de la plaza de la Misericordia!
Dos ayudados por alto es el preámbulo del cuadrado del toro para efectuar la suerte suprema.
En la suerte contraria logra una gran estocada ligeramente trasera. El toro dobla en medio de una gran ovación.
Se pide la oreja, aunque no de manera mayoritaria, y el Presidente no la concede.
Saluda desde el tercio al ser arrastrado su enemigo. Se le aplaude para que de la vuelta al ruedo pero el vallisoletano no accede.

Sale el quinto de la tarde. Es el segundo de Manolo Sánchez. Luce el número 101. Forastero es su nombre. Pesa 496 kilos. Negro mulato del 12 del 04.
Manolo Sánchez lo recibe con el capote andándole para atrás enseñándole a embestir sin dejarle cruzar y templándole la embestida sin dejar que toque el capote. Manolo logra no obstante una verónica buena que remata con una media,
Cuando Félix Navas se hace cargo del toro para llevarlo al burladero de suerte se le cuela por el pitón izquierdo.
En la entrada al caballo que monta Héctor Vicente, quien se agarra muy trasero, levanta al jaco. Cuando Félix Navas lo saca del caballo, el toro no muestra afectividad alguna por los capotes y menos por el que posteriormente le ofrece su matador.
Entra de nuevo con fuerza al caballo y ahora el piquero se agarra en el sitio y lo está pegando para seguidamente levantar la vara y continuar martilleando sobre la herida infringida.
En banderillas con lidia de Jesús Navas parean Juan Martín Soto que deja con facilidad un par en todo lo alto y Raúl Gómez “el Pela” quien, haciéndolo todo, las coloca arriba. Cierra Juanín con un excelente par teniendo que tomar rápidamente la tronera del burladero porque el toro aprieta hacía los adentros como demostró en el par de “El Pela” que hubo de tomar el olivo.
Manolo Sánchez brinda al público siendo correspondido con una ovación.
Comienza la faena de muleta por alto. En el segundo muletazo el toro le pone la zancadilla con la pata izquierda y está a punto de ser derribado. Seguidamente toreando con mucha elegancia lo saca fuera de las dos rayas delimitadoras del tercio de varas.
Se distancia del toro y portando la muleta en la mano derecha, logra cuatro buenos redondos ligados, que remata con el pase de pecho sobre la mano derecha. Ovación.
Naturales extraordinarios de mano baja en serie de cuatro que remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda.
Nueva serie de naturales extraordinarios de temple y remate.
Muleta en la derecha. Serie de cuatro redondos enganchados que remata con un pase de pecho sobre la mano derecha que también resulta enganchado.
Nueva serie de redondos que ahora resultan excelentes, templados y bien rematados.
¡Manolo ha toreado con mucha despaciosidad! Es ovacionado.
Con unos trincherazos por bajo busca la igualada.
En la suerte contraria estocada entera. El toro dobla y “El Pela” acierta a la primera.
Se pide la oreja en varios sectores de la plaza y el presidente la concede.

Sale el tercero. Luce el numero 90. Arrriesgado es su nombre y pesa 574 kilos. Su capa es tostada.
De salida remata en el burladero con ambos pitones.

Manuel Díaz “El Cordobés” lo saluda por verónicas a medida que lo va ganando terreno para sacarlo al centro del ruedo donde remata con una media verónica ante la alegría de su esposa Virginia que presencia la corrida desde un tendido.
Con lances a media altura lo lleva al caballo de picar. El piquero se agarra ligeramente trasero y caído para levantar de inmediato la vara a pesar de que el toro sigue apretando a un caballo que sabe su oficio y aguanta el empuje del toro. Dado que el toro sigue apretando el piquero ahora lo pega.
Manolo hace su quite por dos chicuelinas y remata con una media a un toro excesivamente parado.
Seguidamente lo lleva al caballo. El piquero se agarra perfectamente arriba cambiándose el tercio de inmediato.
Julio Aparicio aprovecha su quite con dos verónicas rematadas con una media. Dado que el toro lo sigue apretando ha de deshacerse de él con una revolera.
En banderillas Vicente Yangüez “El Chano” coloca un excelente par siendo perseguido por el toro. Domingo Valencia deja el par ligeramente trasero y cierra “El Chano” con un par excelente que al ser ovacionado propicia el desmonterado.
Manuel Díaz brinda al público y es correspondido con una ovación.

Comienza de rodillas toreando por redondos al filo de las tablas. De pie lo saca al centro del ruedo con dos pases contrarios de tirón, que vacía con un pase de pecho sobre la mano derecha. Muleta sobre la mano derecha. Tres redondos despegados, que remata con un pase de pecho sobre la mano derecha.
Con nerviosismo el torero se mesa los pelos.

Sigue sobre la derecha en serie de tres redondos buenos, que remata con el pase de pecho sobre la mano derecha.
Comienza a sonar la música.
Sigue por redondos. Dos derechazos, a los que sigue un martinete y el salto de la rana. ¡La improvisación de Manuel Díaz!
En la suerte natural haciéndolo todo el torero, logra casi media estocada en buen sitio que, tras capoteo de los subalternos, el toro se va a las tablas y allí Manolo acierta al primer golpe de verduguillo.
Se pide la oreja no de manera mayoritaria y el presidente no la concede.

Sale el sexto toro. El toro de la jota. Número 16. Arisco. 616 kilos.
El Cordobés lo recibe por verónicas que remata con una media sobre el pitón derecho del toro.
Pica Juan Francisco Peña que se agarra perfectamente arriba y a pesar de que el caballo pierde las manos no logra desmontar al piquero. ¡Excelente vara!
Manolo ante un toro con embestida cansina e incierta lo lleva por segunda vez al piquero y lo deja entre las dos rayas para que el toro acuda. Al entrar el piquero se agarra arriba y el Cordobés se destoca para pedir el cambio de tercio.
Un tercio de banderillas donde no hay nada destacable y seguidamente Manolo comienza su faena de muleta con dos pases por alto pegado a la barrera para continuar con la muleta sobre la mano derecha vaciando al toro por alto. Dos nuevos pases por alto a un toro que no tiene afectividad alguna.
El Cordobés desesperado se va al centro del ruedo momento que el toro aprovecha para echarse.
El Cordobés trata de sacar al toro a los medios pero no lo consigue a pesar de los esfuerzos puestos en acción.
El toro no pasa. Puntea en el medio del pase y el torero se desespera. Desesperación que también se nota en el rostro de su esposa quien, con gestos le conmina a que acabe pronto con el manso.
El Cordobés le machetea sobre ambos pitones antes de irse a por el estoque de matar.
En la suerte natural haciendo todo el torero logra una estocada casi entera, en el sitio. El toro se amorcilla y no atiende a los capotes de los subalternos. Manolo toma el estoque de descabellar. Saca el estoque. Falla en el primer intento y acierta a la segunda. Es ovacionado.