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martes, 14 de octubre de 2008

LA CORRIDA DE VALDEFRESNO EN LA FERIA DEL PILAR ZARAGOZA 2008.
Por LUIS ALONSO HERNÁNDEZ. Veterinario y escritor.

Con medio aforo cubierto de espectadores y bajo la presidencia de Francisco Bentue Ferrer, siguiendo a los caballos que montan los alguacilillos, Alfonso Pascual y José A. Tobajas hacen el paseíllo los diestros:
El Fundi (tabaco y oro).
Antonio Barrera (azul y oro)
Serafín Marín (rioja y oro).

Sale el primer toro de la tarde que atiende por Lirito, herrado con el nº 2 y con 514 kilos de peso. Comienza escarbando a pesar de ser un toro muy bonito que humilla mucho pero que carece de afectividad.
El Fundi toreándole por la cara a consecuencia de que el toro aprieta, se sale con él a los medios, para rematar los lances finalmente con una media verónica.








Es una verdadera capea la practicada para llevar al toro al caballo donde todo el mundo ha dado capotazos a este toro correoso que no ha parado de caminar y correr desde su salida de chiqueros.
Tampoco le han aguantado en el burladero de suertes por lo que se le produce un desgaste grande al cornúpeta.
Tras tomarle de capote, en la raya de dentro de picar donde está escarbando, El Fundi, lo lleva al caballo que monta Jesús Vicente que se ha agarrado arriba en las dos entradas.
El Fundi que se ha reservado bastante en el primer tercio, tampoco va a poner banderillas.
Con lidia de Raúl Ruiz, parean Ramón Moya que las deja arriba. Venancio Veneros deja un solo palo arriba. Y cierra Moya con un par de buena ejecución pero que al caerse los dos palos ha de entrar nuevamente a parear para tras dejar los dos palos arriba cambiarse el tercio.
El Fundi no brinda. En el segundo muletazo el toro pierde los tercios traseros, un toro carente de fijeza. En el tercer muletazo trata de rajarse.
Con la muleta en la izquierda dos naturales ayudados y el toro se raja.
Un natural suelto ayudado y el toro se desentiende por lo que ha de llamarle el diestro la atención golpeándolo con el simulado sobre la grupa.
Un toro que no quiere muleta y cuando El Fundi va a cambiar de estoque se va por él, en el típico arreón del manso con malas ideas, y está a punto de “echar mano” al diestro de Fuenlabrada. En la suerte contraria un estoconazo que resulta contrario y el toro se echa. El puntillero acierta a la primera.

Su segundo oponente corresponde al cuarto de la tarde es el nº 60. Langostito. Con 535 kilos. Tiene una encornadura en lira al ser muy estrecho de sienes.
El Fundi se estira de entrada en unos buenos lances que ha rematado con una buena media verónica.
El encargado de picar es Juan Carlos Sánchez. En un momento en que el piquero le pierde la cara buscando nuevos terrenos para que el remiso toro se arranque, se le arranca el toro, y se agarra ligeramente trasero.
El Fundi realiza un quite por delantales a un toro que viene andando y finalmente se para.
Lo lleva nuevamente al caballo, el piquero larga vara y se agarra arriba.
Con lidia de Ramón Moya, en banderillas Raúl Ruiz deja los dos palos arriba. Venancio Veneros yéndose por el toro parea con efectividad y cierra Raúl colocando los palos arriba.
El Fundi a través de los micrófonos de televisión brinda a su madre. Y comienza su faena toreando al toro por la cara en pases sin cruzar hasta que lo saca fuera de las dos rayas de picadores. Una tanda de cuatro redondos que ha rematado con el pase de pecho sobre la mano derecha a un toro que tiene transmisión si bien el defecto de no humillar.
La muleta en la izquierda. Cuatro naturales que abrocha con un pase de pecho sobre la mano izquierda.
Una banderilla se le cae al toro en uno de sus cabezazos y cuando la banderilla se le clava en el brazuelo reacciona violentamente estando a punto de atropellar al torero.
La muleta ahora en la mano derecha para lograr dos tandas de cuatro redondos cada una que remató con sendos pases de pecho.
Con una embestida muy desigual por parte del toro El Fundi se ha llevado la muleta sobre la mano izquierda tratando de torear al natural para robarle tres buenos naturales que remata con el doble pase de pecho. Es aplaudido.
En la suerte contraria logra estocada caída y delantera que tira al toro sin puntilla.


El segundo de la tarde se llama Buscador. Su peso 551 kilos. Un toro de cuerna playera.
En unos de los lances de saludo que le propina Antonio Barrera, el toro pierde los cuartos traseros quedando inútil totalmente la extremidad posterior izquierda con las consiguientes protestas por parte del público de la Misericordia.
El toro entra al caballo y en el momento en que el picador le coloca la puya se derrumba totalmente.
El presidente saca el pañuelo verde. Salen los mansos que dirigidos por el mayoral Carlos Cerdán realizan su trabajo con celeridad.

Sale el sobrero que pertenece a los Hermanos Fraile Maza. Tiene el nº 26. Playero de nombre. Peso 515 kilos. Capa negra y es del 08-04.
Desdeña el capote de Antonio Barrera en el primer lance, al tiempo que dando un salto cocea. No se ha dejado torear de capote.
El encargado de picar es Benito Quinta que ha de trabajar para que el toro entre a la cabalgadura. Cuando el toro acude se agarra arriba a un toro que aprieta aunque con la cara alta.
Al probarle Barrera parece que el toro ha quedado más suave ante el capote aunque continúa sin humillar.
En la segunda entrada Quinta se agarra arriba a pesar del cuarteo del toro en la entrada y se limita a señalar el puyazo.
Con la lidia de Paco Peña, parean, Pepín Monje que deja las dos arriba. Manuel Muñoz al sobaquillo deja los dos palos arriba y cierra tercio Pepín Monje, vestido con un terno verde botella y azabache con un excelente par.
Antonio Barrera comienza la faena ante un toro muy desagradecido puesto que tras darle el primer pase por alto, al segundo no acude.
Cuando entra al pase lo único que hace es derrotar y pendiente de irse a las tablas.
Un toro manso de solemnidad que huye de continuo hacia las tablas.
Ante semejante prenda Antonio Barrera se va en busca del estoque de matar.






En la suerte contraria consigue un pinchazo arriba y el manso con malas intenciones se va a por él y está apunto de echárselo a los lomos, seguidamente le tira una patada que el matador ha de esquivar.
En la segunda entrada nueva pinchazo arriba resultando nuevamente perseguido y el toro hace hilo con él y a punto de ser cogido.
Entra por tercera vez a matar a este toro en suerte complicada porque al no humillar no le deja pasar al matador. Logra meter el estoque hasta la mitad. Estoque que sale despedido. A la cuarta entrada logra una media estocada atravesada y caída que hace doblar al manso. Lebrija cuando trata de apuntillarlo lo levanta. Se echa nuevamente. Lebrija lo levanta nuevamente, por lo que Barrera se decide a descabellar fallando en el primer intento y acertando en el segundo a pesar de que el toro no descubre el agujero occipital.

Su segundo corresponde al quinto de la tarde. Lleva el nº 119 y con un peso de 543 kilos. Sale con los crotales en las orejas.¡Imagen horrenda!








Antonio Barrera lo recibe por verónicas. El toro parece que humilla más que los anteriores.
Barrera lo lleva al caballo y al hacerle un recorte el toro pierde las manos restregando el morro por el suelo, si bien se levanta de inmediato
Acude al caballo de Carlos Pérez que se agarra ligeramente trasero. Mejor en la segunda entrada.
En banderillas, Manuel Muñoz Lebrija parea al sobaquillo en par arriba. Paco Peña cierra tercio con un extraordinario par.







Barrera comienza su faena con el pase cambiado por la espalda. Uno por alto, otro por la espalda. Y sigue por redondos en serie de cuatro que remata con el pese de pecho sobre la derecha.







Nueva serie de cuatro redondos que abrocha con el de pecho al tiempo que suena la música.
Otra serie más de cuatro redondos el último de los cuales lo prolonga con un cambio de mano de la muleta sobre la marcha, para rematar con el pase de pecho sobre la mano izquierda.







Tres naturales que remata con una trincherilla.
Sobre la mano derecha cuatro redondos que han resultado enganchados en el remate. Un martinete y remata con una especie de trincherilla.







Finaliza la faena por manoletinas en serie de tres.
Pinchazo arriba en la suerte natural que es escupido. Media estocada en la que a pesar de pinchar hueso aprieta con ganas.
Con el descabello acierta al segundo intento.

Sale el tercero nº 83. Buscador, con un peso de 496 kilos. Negro del 09-04. Se trata de un toro más fino y bajo que los anteriores.







Serafín Marín lo recibe con tres verónicas muy buenas que ha rematado con una media verónica estupenda.
Tras pasar por todos los capotes de la torería, se hace cargo de él Serafín Marín de cuyo capote también sale suelto.
Pica Manuel Molina quien se agarra arriba en puyazo cortito y de inmediato deja de apretarlo si bien no quita la puya de la herida inflingida.








Serafín quita por tres buenas verónicas que remata con la revolera.
Segunda entrada al caballo. Piquero que se agarra arriba limitándose a señalar el puyazo.
Serafín Marín brinda a su padre, por quien lleva un crespón negro en el antebrazo izquierdo, y deposita con mimo la montera sobre el albero de Pignatelli.








Cuatro excelentes muletazos y en el último el toro pierde las manos. Nueva serie sobre la derecha que ha rematado con el pase de pecho sobre la mano derecha.









Tres nuevos redondos ligados. Nueva serie de cinco redondos que rematada con el pase de pecho sobre la mano derecha.






Deja que el toro se oxigene. El pase de las flores para quedar colocado y seguir por redondos. En el segundo pase le arranca la muleta.







La muleta sobre la mano zurda. Ha dado unos buenos naturales sobre todo uno lentísimo, pero el público se ha enfriado a consecuencia de los desarmes
El toro muy remiso a embestir en la segunda serie de naturales donde no ha habido ajuste. Marín remata con el pase de pecho sobre la zurda.
En la suerte contraria logra una buena estocada en todo lo alto quizá ligerísimamente desprendida. El toro se acula en tablas. Capotea de los subalternos sobre ambos pitones. Marín convencido de que el toro va a doblar. Pero dado que el toro está tardando en echarse toma el descabello para tras fallar en el primer intento y sonar un aviso, acertar en el segundo.
Su actuación es premiada con palmas.

Su segundo corresponde al sexto de la tarde Pomposito nº 126, 521 kilos .Negro del 08-04.







Marín lo recibe con un lance a pies juntos a este toro que arrastra la cola. Sigue con unas excelentes verónicas que remata con dos medias.
Lo lleva al caballo que monta Tito Sandoval quien le mete de inmediato las cuerdas en medio de palmas de tango por las escasas fuerzas del astado.
En la segunda entrada se agarra también arriba.
En banderillas Fernando Casanova pone un buen par. José Antonio Maqueda deja las dos arriba con habilidad. Cierra Casanova poniendo una e intentando poner la segundo en dos tiempos.








La faena la comienza Serafín Marín con cuatro derechazos que abrocha con el de pecho sobre la mano derecha.
Continúa con la muleta sobre la mano derecha para lograr una serie de tres redondos que remata con el de pecho con la derecha.
La muleta en la mano zurda para administrar una serie de cuatro naturales que remata con el de pecho sobre la mano izquierda.








Nueva serie de tres naturales que abrocha con el de pecho sobre la mano izquierda.
La muleta en la derecha para lograr una serie de tres redondos ligados y de mano baja.
Cambia de mano la muleta y logra dos naturales de frente dando el pecho. El toro se para. Dos nuevos naturales que remata con el doble pase de pecho comenzando con el de la mano izquierda. Una trincherilla y remata con el de pecho.
En la suerte contraria entrando muy deprisa porque el toro metía la cabeza entre las manos y se encogía, logra una estocada en la yema que hace doblar al toro.
El puntillero acierta a la primera y Serafín Marín recibe una ovación.




Hay dos momentos que me resultaron muy emotivos:
El abrazo de pésame a Serafín Marín por parte de su compañero Antonio Barrera en el patrio de cuadrillas.
El momento de concentración de Serafín Marín con la barbilla hundida en la contera del burladero de matadores, antes de la salida de su primer toro. Indudablemente se acordaba de su padre que siempre le acompañó en todas sus actuaciones.
¡Mí pésame más sentido para una gran torero y mejor persona como es Serafín Marín!