TERCERA ESPANTADA DE MORANTE DE LA PUEBLA.
Por
LUIS ALONSO HERNÁNDEZ. Veterinario y escritor.
La
primera aconteció en mayo del 2004 alegando problemas psíquicos que le llevaron
a tratamiento de depresión en Miami.
¡Nos
impactó y lo sentimos! ya que una persona enferma siempre es digna de
consideración.
La
segunda en junio del 2007, con su alegación de pérdida de ilusión, tras fracaso con corte de una sola oreja en
la encerrona de la Corrida de Beneficencia en Madrid.
Esta decisión, nos cayó hasta mal.
La
tercera del 13 de agosto del 2017 donde alega aburrimiento y nos culpa a los
veterinarios, presidentes e incluso a
los Estamentos de la Fiesta de sus fracasos me produce indignación.
Resulta
que el toro es demasiado grande en las plazas de 1ª y eso que él nunca se ha
enfrentado a toros-toros como pueden ser los miuras, palhas, murteiras,
victorinos, adolfos, cuadri y un largo etc de ganaderías problemáticas.
De
sus maníacas depresiones puede esperarse
cualquier reacción, tanto para bien como para mal. En esta ocasión ha tocado la
de arena y tal vez por eso, contando que en su subconsciente también están
reflejadas las muertes de los compañeros de estas temporadas y los “repasos”
sufridos por parte de los pipiolos que
acaban de aterrizar en este mundo taurino con el mismo material taurico, por fin ha tenido ética profesional
El
echar la culpa a los demás es propio de personalidades quebradizas y
caprichosas. De los que se creen genios a base de las lisonjas de quienes le
rodean.
Se
va, gracias a Dios, el figurón del arte tras veinte años de oficio en los que la crítica siempre le ha
mimado ofreciéndole lisonjas como: “el de
los naturales porcelana” y derechazos
juncales”.
El
mismo que parece haber acuñado la frase dedicada a los alumnos de Escuelas
Taurinas de: “hay que ser diferente a los
demás para destacar”, cuando esa misma frase se la escuché en la década de
los años 60 a Manuel Benítez El Cordobés”
en la finca que el Vizconde de Garcigrande poseía en el término de Alaráz
(Salamanca) un 20 de septiembre que
era el día anterior al de su actuación en la corrida de siete toros tradicional
del 21 de septiembre en la capital charra formando terna con Diego Puerta y “Viti”, con Alvarito Domecq, como rejoneador, por
delante.
La
anécdota ya la he referido en otra parte de mi blog pero en síntesis es la
siguiente:
Luis el hijo del
vizconde era un experto rejoneador muy amigo de Alvarito. El rejoneador
sevillano tenía necesidad de entrenar a sus caballos y para ello solicitó de su
amigo unos toros para llevar a efecto esta acción.
Salió a la plaza de
tientas un toro mogón del pitón derecho con el que Alvarito desentumeció a sus
tres caballos.
Tras la actuación del
primer caballo. Santiago Martín “El Viti” que, ocupaba el burladero justo
delante de la tapia en la que un servidor permanecía encaramado, trató de picar
a “El Cordobés” con estas palabras:
-Manolo: ¿A que no
eres capaz de echarte al ruedo y dar unos muletazos a este toro?
Y Manuel, pidió una
muleta, se fue a por el toro y, le instrumentó cinco naturales de un temple y
remate extraordinarios.
Cuando volvió al
burladero, en medio de la ovación de cuantos presenciamos la acción, “El Vii”
le dijo:
-Manolo y ¿por qué
esto que acabas de hacer aquí, no lo haces en la plaza?
“El Cordobés”
respondió:
-Porque sería igual
que tos vosotros.
Momento en que nació la frase de mostrar "diferencias en el toreo"
José
Antonio Morante Camacho con sus 38 años de vida, se va de los toros tras la
bronca tributada por el público de El Puerto de Santa María al saldar su mano a
mano con “El Juli” con el balance de
pitos, silencio y bronca que contrasta con las 5 orejas y rabo conseguidas por
el de Velilla..
¡Se
va como se fue El Brexit y no pasará ninguna hecatombe!
Lo
sentirán los componentes de su equipo al quedarse sin trabajo remunerado
durante el tiempo que reencuentren puestos en otras cuadrillas. También algún
que otro ganadero propietarios de los hierros con los que normalmente trabajaba
el de la Puebla, mientras que otros criadores de toros ni se acordarán de él al no haberles matado
toro alguno durante sus veinte años de oficio.
Tampoco
le echaremos de menos los aficionados a los toros de verdad, pues estamos
hartos de verle en carteles interesantes
donde se limitaba a hacer el paseíllo, fumarse un puro durante la
corrida y a fracasar estrepitosamente en
la mayoría de las corridas de plazas de primera y de segunda con aficiones
buenas.
No
hemos sido los veterinarios ni las presidencias los causantes de sus fracasos, puesto que nosotros no criamos ni seleccionamos, limitamos nuestra acción a ajustarnos al Reglamento Taurino establecido, sino, tal vez, esa “prensa especializada” que no ha
dejado de darle “jaboncillo” durante las dos últimas temporadas y que le apoyó
en aquella huelga sevillana que encabezó y fue seguida por los figurones del
escalafón. ¿Recuerda?
Sr.
Morante: ha decidido irse y...¡Bendito y con Dios vaya! y así dejará de “darnos la tarde” en ferias
como la de Sevilla de este año donde no dio una a derechas en ninguna de las ocho oportunidades que inmerecidamente le dio la empresa a la
que había apuñalado por la espalda.
Nos
ahorrará muchos euros, pues con dos verónicas de culillo y barbilla
remetidos se puede ganar, con la
colaboración de la prensa afín, una batallita, pero nunca una campaña bélica en
la que se ha convertido la liga de la temporada taurina a causa de los recortes en la configuración
de festejos en la que usted participaba demasiado.
Se
va un torero con mucho valor (según la prensa especializada) que, no sabemos que
hubiera hecho de padecer la enésima parte de los contratiempos
sufridos y superados a fuerza de tesón y ganas de ocupar los puesto de arriba, por toreros como su amigo Padilla o el bueno de Escribano.

Ha
elegido el momento preciso para irse. Justo cuando la temporada comenzaba a
endurecerse con ferias importantes donde el toro es más grande y con más edad.
Deja
colgados a los empresarios de las plazas de Bilbao, Almería San Sebastián de
los Reyes, Cuenca, Palencia, Valladolid, Murcia, Albacete y Logroño, con toros
de, salvo Jandilla en Bilbao de las ganaderías de siempre es decir: Zanduendo (3 tardes), Núñez
del Cuvillo (2 tardes), Hnos Jiménez ( 2 tardes), Juan Pedro y el Vellosino.
Deja diez puestos para otros toreros donde esperemos entren algunos de los que se fajan con verdaderos morlacos, que ven escasos euros en sus comparecencias y que a pesar de no ser reconocidos, NI SE QUEJAN.
¡Demasiado doblegarse a sus caprichos que luego carecieron de efectividad.
Le han aguantado demasiado putadas los empresarios que luego le contrataban. ¡Allá ellos con sus decisiones!
Si miramos su historial tampoco es para tirar cohetes. Una Puerta del Príncipe en la Maestranza lograda en la feria de abril sevillana del año 1999.y en Madrid nunca logró rebasar el dintel de la Puerta Grande a pesar de que el listón quedó en 2 trofeos.
Es muy posible que, si usted no hubiera culpabilizado a mi digna profesión como causante de su estampida, posiblemente este artículo no hubiera tenido vida, pero uno tiene su corazoncito y a veces se siente ofendido.
¡Vaya
con Dios señor Morante y que Ëste le de tanta felicidad como descanso deja!