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viernes, 15 de octubre de 2010

LA CORRIDA DEL 12 DE OCTUBRE DEL 2010, EN LAS VENTAS.
Por LUIS ALONSO HERNÁNDEZ. Veterinario y escritor.
Se la denominó Corrida de la Hispanidad y para ello en la terna entró un torero mexicano con oficio, yo diría que con mucho oficio si le comparamos con sus compatriotas que han pasado por aquí.

La corrida perteneciente al ganadero salmantino Juan Luis Fraile era de procedencia “graciliano” aquellos toros de casta santacolomeña, si bien diferían fenotípicamente de los originales, pero no en comportamiento. Hicieron muchas cosas de santacoloma y por ello cuando proyectamos el Centro Tecnológico del Toro de Lidia en Valladolid les incluimos como encaste a recuperar por considerarlos muy interesantes. Los seis ejemplares fueron TOROS DE MADRID y además tuvieron movilidad y equilibrio.
Desconozco si sus pitones estuvieron protegidos por fundas, pero a tenor de cómo se partían los pitones y las vainas, me dieron la impresión de esa falta de oxigenación cuticular que las fundas conllevan.

Bajo la presidencia de don Manuel Muñoz Infante y con algo más de ¼ de plaza, hacen el paseíllo los diestros Alfredo Ríos “El Conde” (mexicano que confirma alternativa) con terno verde y oro con los cabos blancos, Luis Vilches el utrerano (frambuesa y oro) y Eduardo Gallo el salmantino (teja y oro).

Sale el primero de la tarde. Cumplidor. Luce el número 24. Un toro precioso, musculado y bien montado de pitones cuya lidia corresponde al confirmante de alternativa que por otra parte es el más antiguo de la terna.
Embiste con violencia al primer capotazo de saludo del mexicano. Luego entra con fuerza al capote pero sale suelto y se arranca a los caballos de picar cuando aún no han ocupado la posición reglamentaria.
El piquero se agarra arriba tras rectificar el puyazo. Roberto Martín “Jarocho” es quien le saca del caballo.
Ya en el capote de “El Conde” éste con lances templados lo lleva a la segunda entrada al caballo y el piquero se agarra trasero para rectificar de inmediato y pegarle porque el toro aprieta.
Luis Vilches hace su quite en base a dos verónicas que remata con una media.
En banderillas con lidia de “Jarocho” banderillea el matador.
Toma unas banderillas con papelillos blancos y la bandera de su país en uno de los extremos, blancos, amarillos y azules.
En el primer par gana la cara del toro con facilidad y deja un excelente par. El toro hace hilo con el banderillero y lo persigue hasta la barrera estando a punto de alcanzarlo en el salto de la misma.
Un buen segundo par donde el mexicano desde el centro del ruedo se va a por el toro que está entre las dos rayas. Clava arriba.
El tercero es de dentro a fuera. El mejor de los tres.
“Jarocho” a una mano lo lleva al burladero de suertes para retenerlo mientras se realiza la ceremonia de confirmación de alternativa de “El Conde” por parte de Vilches con Gallo de testigo.
Tras la ceremonia y cambio de muleta, “El Conde” brinda a Morante que ocupa burladero de callejón.
La faena la comienza doblándose por el pitón izquierdo del toro. El toro desdeña la muleta del mexicano. Seguidamente acude y el torero se dobla por ambos pitones, le gana terreno y remata con el pase de pecho sobre la mano derecha.

Toro entre las dos rayas. "El Conde" en el centro del ruedo. Muleta en la mano izquierda. Tres naturales que abrocha con el pase de pecho sobre la mano izquierda.
Continúa con la muleta en la zurda. Un natural ayudado y seguidamente una serie de tres naturales que abrocha con el pase de pecho sobre la mano izquierda.

Sigue con la zurda. Serie de cuatro naturales que tras afarolado remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda.

Muleta en la mano derecha. Lo saca con un pase de tirón de la querencia y acto seguido se lleva la muleta a la izquierda. Serie de tres buenos naturales que remata con una trinchera sobre el pitón derecho del toro y otra sobre el izquierdo.
Un trincherazo para quedar colocado al toreo al redondo. Un buen redondo. Pierde la muleta. Sigue con tres excelentes redondos que remata con un trincherazo sobre el pitón izquierdo y un cambio de mano de muleta.
Tras tomar el estoque de matar, con pases por delante sin cruzar cambia al toro de terreno en busca de la igualada.
En terreno de barrera y en la suerte contraria entra muy de largo y pincha arriba encontrando hueso.
Nuevamente en la suerte contraria logra una casi entera, desprendida. Suena un aviso. El toro dobla, y el puntillero acierta a la primera.
"El Conde" recibe aplausos.
Su segundo corresponde al cuarto de la tarde. Pesa 542 kilos. Marcado con el número 30. “Rondino” es su nombre. Luce unas perchas impresionantes.
"El Conde" de saludo le administra unas excelentes verónicas en las que el toro se le cierne ligeramente por el pitón derecho. Remata con una media verónica sobre el pitón izquierdo.
Con pases por delante sin cruzar lo lleva con maestría al caballo de picar. El piquero se agarra arriba a un toro que aprieta haciendo una más que excelente pelea en varas.
En la segunda entrada el picador vuelve a agarrarse arriba.
En banderillas “Jarocho” prende un excelente par. Domingo Navarro con efectividad las deja arriba. Cierra tercio “Jarocho” con un buen par de ejecución si bien se cae una de ellas al chocar el arpón con el cuerpo de una banderilla clavada con anterioridad.
La faena la comienza "El Conde" doblándose por ambos pitones al tiempo que le gana terreno hasta sacarlo fuera de las dos rayas.
El toro repone en exceso y sabe en todo momento lo que se deja atrás.
¡Papeleta para el mexicano!
Serie de tres buenos y expuestos redondos por la reposición del toro. Finalmente le propina un derrote que está a punto de desarmar al torero. "El Conde" vuelve a montar la muleta con tranquilidad y ya montada se acerca al toro para administrarle una serie de tres excelentes redondos que, tras cambio de muleta por la espalda, remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda recibiendo la ovación del respetable.
¡Muy valiente "El Conde"!
Con la muleta sobre la derecha logra tres buenos redondos el último de los cuales resulta enganchado en el remate, por lo que el torero vuelve a tomar distancia para lograr otra tanda de tres buenos redondos que, tras cambiar la muleta por la espalda, remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda que resulta enganchado.
Continúa sobre la diestra para lograr una tanda de tres buenos redondos que abrocha con el pase de pecho sobre la mano derecha.
Un trincherazo con la mano izquierda le predispone al toreo al natural. El primer natural el toraco se lo traga, pero en el segundo le pone los pitones en el pecho.
"El Conde" desde este momento comienza una faena de aliño (el toro no admite ni merece otra), con toques de muleta de pitón a pitón, doblándose con él y tratando de quitarle las muchas fuerzas que aún posee.
En la suerte contraria, metiendo la mano con habilidad, logra estocada entera en el sitio que es refrendada por parte del público de Las Ventas.
Cuando el toro dobla "El Conde" es ovacionado.
El segundo de la tarde es el número 39. Pesa 531 kilos. "Espartín" es su nombre. Un toro bajo pero con unos leños impresionantes.
Desdeña el capote que le ofrece Luis Vilches para darse dos vueltas al ruedo por su cuenta.
Tras acudir a la llamada de un peón desde el burladero, sufre un fuerte golpe al rematar, del que sale ligeramente conmocionado.
A la vuelta, Vilches le administra dos buenas verónicas de las que el toro sale suelto, huído y corretón por su falta de acometividad y fijeza.
El toro se arranca al caballo que guarda puerta y el piquero clava la puya donde buenamente puede. Muy delantero y caído al principio para seguidamente rectificar.
Vilches se hace cargo del toro y con lances por delante sin cruzar trata de llevarlo al picador titular. En el momento del encuentro con el peto pierde las manos y aparecen algunos pitos.
En banderillas con lidia de José Contreras y parean Juan Carlos de Alba que las deja arriba y ha de tomar precipitadamente el olivo. Curro Trillo gana la cara del toro y deja los palos arriba. Cierra Carlos de Alba quien por el pitón izquierdo coloca un excelente par. Ovación.
Ceremonia de devolución de trastos.
Luis Vilches no brinda. Toro y torero en tablas. Un pase contrario. Sigue por contrarios vaciados por arriba.
El toro se aquerencia en tablas y Vilches con pases de tirón lo saca fuera de las dos rayas.

Muleta en la mano derecha. Serie de tres buenos redondos que, tras cambio de muleta por la espalda, remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda.
Dos buenos redondos. Se distancia del toro.

Tres buenos redondos que, tras cambio de muleta por la espalda, remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda.


Nueva tanda de cuatro buenos redondos que remata con un trincherazo al que sigue el pase de pecho sobre la mano izquierda.
Muleta en la zurda. Natural que remata por alto con la finalidad de aliviar al toro. Un toro que repone mucho y sabe lo que se deja atrás.
Nuevamente la muleta en la zurda. Dos naturales a la salida de los cuales el toro lo busca. Nuevos naturales que remata con un redondo al que sigue un pase de pecho sobre la mano derecha y dobla con el de pecho sobre la izquierda. Desplante torero.
Se distancia del toro. Muleta en la derecha. Redondos de uno en uno, buscando la colocación tras el remate.
En la faena falta la emoción dimanante de la repetición del toro. La serie la remata con un pase de pecho sobre la mano derecha en la que el toro lo busca y lo pone en aprietos.
¡Vilches por encima del toro!
El toro ahora acusa el fuerte golpe recibido cuando derrotó en el burladero y quedó conmocionado.
En la suerte natural Vilches entra a matar en el momento en que el toro se distrae y logra un pinchazo hondo que el toro escupe.
En la suerte contraria mete la mano con habilidad y logra media estocada perpendicular y atravesada que tras capoteo de los peones dobla.
Su segundo corresponde al quinto toro de la tarde se llama “Jaquetón” pesa 519 kilos y luce el número 34. Un toro de pitones muy desarrollados. Como el resto de la corrida pertenece al hierro de Juan Luis Fraile y Martín.
Sale suelto de los dos capotazos que Luis Vilches le administra a modo de saludo. Se va a por el caballo que guarda puerta y el piquero le da un picotazo corrido.
Al rematar sobre un burladero los pitones se le parten por la misma punta. ¿Consecuencia de haber portado fundas protectoras?
El encargado de picar es Francisco Romero. Han llevado muy mal el toro al caballo y el piquero no ha podido agarrarse arriba. Luego en el momento en que encontró la oportunidad trató de rectificar sin encontrar el sitio. La puya quedó trasera y caída.
En la segunda entrada el piquero se agarra muy trasero. Vilches solicita el cambio de tercio que el presidente concede.
En banderillas con lidia de Juan Carlos León parean, José Contreras que las deja arriba. El tercero Curro Trillo a toro pasado no deja ninguna arriba. Entra de nuevo Contreras que las deja arriba. Se cambia el tercio con dos pares.
Vilches comienza doblándose por ambos pitones y con pases por delante sincruzar lo saca fuera de las dos rayas.



Con la muleta sobre la zurda logra unos naturales a media altura porque el toro no humilla y remata con el pase de pecho sobre la mano derecha.
Continúa con naturales ayudados. En el tercero el toro lo busca y lo pone en aprietos.
Sigue Vilches toreando por naturales ayudándose del estoque simulado. La serie lograda de tres la remata con el pase de pecho sobre la mano derecha.
La faena no remonta porque el toro no se entrega y en cambio está pendiente del torero para cogerlo.

Vilches se lleva la muleta a la mano derecha y le roba unos buenos redondos. Continúa por redondos que el toro no admite y finalmente remata con el pase de pecho sobre la mano derecha.
Trata de dar unos naturales expuestos sobre la mano izquierda en serie de tres que el público ni considera.
Muleta en la derecha. Dos redondos que remata con el pase de pecho sobre la mano derecha.
Algunos pitos por parte de la concurrencia conminan al torero a que abrevie.
En la suerte natural el toro se mueve en el momento del embroque y Vilches consigue un pinchazo arriba sin soltar.
En la suerte contraria al encuentro puesto que el toro no se queda quieto logra una estocada casi entera ligeramente desprendida de la que el toro cae sin puntilla.
El tercero tiene un peso de 543 kilos. Lleva el número 41. Su nombre "Rosalero". Un toro con el morrillo rizado y unos buenos leños. Un toro muy bien hecho.
Eduardo Gallo le recibe por verónicas en serie de tres. Al cuarto capotazo es desarmado.
Cuando el toro acude al caballo, el piquero se agarra caído para rectificar de inmediato. Gallo conmina a su picador para que levante la vara.
En la segunda entrada el picador se agarra arriba. A la salida, el toro derrota en el burladero y se astilla el pitón.
En banderillas con lidia de José Luis Barrero, José Gómez “El Topa” deja un buen par. Par que repite al cerrar tercio.
Eduardo Gallo brinda al público de Las Ventas
Comienza doblándose por ambos pitones para rematar con un pase de pecho sobre ambos pitones.
Entre las dos rayas. Muleta en la mano derecha. Dos buenos redondos. Da distancia al toro. Serie de cuatro buenos redondos que remata con el trincherazo sobre el pitón izquierdo del toro.

Dos buenos redondos que ha rematado con un trincherazo sobre el pitón izquierdo del toro para seguidamente rematar con el pase de pecho sobre la mano izquierda.

Muleta en la zurda. Dos buenos naturales. Se distancia del toro. Sigue con la muleta en la izquierda. Dos naturales en el segundo de los cuales resulta acosado. Remata con dos trincheras sobre ambos pitones.
Un trincherazo le coloca para seguir por redondos. Buenos redondos que remata con un pase de pecho sobre la mano derecha.

Sigue sobre la derecha por redondos de buena factura que, tras cambio de muleta por la espalda, remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda.

En la suerte contraria pinchazo arriba sin soltar. En la suerte natural estocada baja y tendida. El toro dobla y el puntillero acierta al tercer intento.



El sexto y último de la tarde, resulta ser el toro más grande y más cornalón de la corrida salmantina. Número 33. “Pensón” de 551 kilos. Es aplaudido de salida, debido a su trapío, por el público de Las Ventas.
El toro que sale muy corretón encontrándose en una de sus correrías con el piquero que guarda puerta, quien le propina un picotazo del que sale suelto.
Cuando acude al capote de Eduerdo Gallo, éste le administra una buena verónica.
Seguidamente lo lleva al caballo titular que monta Francisco Tapia, éste se agarra arriba y el toro no se emplea con el caballo. Gallo conmina a su picador a que levante el palo.
En la segunda entrada al caballo, Tapia vuelve a agarrarse arriba para seguidamente percutir con la puya sobre la herida. El toro sale suelto.
En banderillas el encargado de lidiar es José Gómez “El Topas” que está desastroso y a punto de ser cogido, pues el toro le quita el capote y sale con él ensartado en el pitón derecho. José Luis Barrero las deja arriba en sus dos entradas siendo aplaudido.
La faena de muleta Gallo la comienza con muletazos vaciados por arriba y en ellos el toro da unos derrotes impresionantes.
A continuación se dobla por ambos pitones para continuar con redondos que remata con el pase de pecho sobre la mano derecha.
Sigue con la derecha. Dos redondos buenos que, tras cambio de muleta por la espalda, remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda.
Sigue con redondos sueltos que remata con el pase de pecho sobre la mano izquierda.
El toro se distrae a la salida de los muletazos y como el torero salmantino no le gana el pitón pues la faena carece de continuidad y aburre a la concurrencia.
Un toro que tenía emoción por el trapío que atesoraba y que a decir verdad no se comía a nadie, pero que se le ha escapado a Gallo al no ganarle el paso en cada muletazo.

En la suerte natural, perdiendo la muleta en el embroque, logra una estocada entera, ligeramente trasera y tendida, que a juzgar por los galopes que el toro da después de ser herido en persecución de los banderilleros que pretenden capotearlo no ha hecho demasiado efecto mortífero.
El toro se acula finalmente en tablas ante el capoteo de los subalternos. Gallo solicita el estoque de descabellar ante un toro que no está para ese menester pues esta muy vivo y con la cara arriba. Pero lo que son las cosas, Gallo acierta al primer golpe de verduguillo.
Una corrida interesante donde no nos dio tiempo a aburrirnos ante los toros gracilianos que llevaron emoción a los tendidos ante las dificultades que, algunos de ellos, presentaron.

Como este blog es seguido por numerosos aficionados de Mejico he querido explayarme un poco en la información gráfica  de lo efectuado por su compatriota Alfredo Ríos "El Conde" quien para mí resultó ser un torero interesante y seguro estoy que de torear con continuidad en España alcanzaría grandes triunfos debido a su gran oficio  y la calidad de su toreo.
¡Felicidades Méjico!