LA GRAVÍSIMA CORNADA DE JUAN JOSÉ PADILLA EN EL PILAR 2011.
Por LUIS ALONSO HERNÁNDEZ. Veterinario y escritor.
Si hay un diestro torero castigado por los toros, ese es JUAN JOSÉ PADILLA “El Ciclón jerezano”.
Un torero dicharachero, divertido, cariñoso, simpático y trabajador en su oficio. Cualidades por las que es querido en todo el mundo taurino.
Padilla en el día de ayer con los complicados toros de Ana Romero que le tocaron en turno, todo lo hizo casi bien, menos el no haber cambiado el tercio de banderillas tras haber puesto en su segundo toro dos pares a un toro orientado en exceso y que únicamente humilló para cogerlo.
Fue su pundonor, sus ansias de superación y su vergüenza torera lo que le llevó al hule de la plaza maña de La Misericordia donde había triunfado en anteriores comparecencias.
Juan José Padilla se fue en manos de las asistencias, tras trastabillarse a la salida del tercer par de banderillas de su segundo, caer al suelo ante la cara del toro y éste rebañarle con el pitón izquierdo y darle un hachazo seco en la parte media de la cara izquierda.
Juan José tuvo fuerzas para levantarse y taparse la cara dándose perfectamente cuenta de la gravedad del percance.
¡No veo! ¡No veo! fueron sus palabras cuando era conducido a la enfermería.
Había estado alegre, risueño, trabajador (hizo de cabestrero metiendo a los dos toros mandados a chiqueros) pero luego…vino la tragedia que está rondando siempre a los toreros aunque muchas veces, afortunadamente, no se produzca.
Ha sufrido una cornada en la cara que afecta al alojamiento de los órganos de visión y oído de la parte izquierda del rostro. El pitón entró por debajo de la oreja izquierda y llegó hasta el ojo para sacarlo de la orbita.
¡Horroroso! Es la cornada invertida que se llevó por delante a Manuel Granero en la plaza de Madrid en el año 1922.
En el Hospital Miguel Server el escáner ha descartado daños cerebrales lo cual es la mejor noticia que se puede dar, pues la cirugía reparadora ahora hace milagros y Juan José es capaz de sobreponerse a todo como la ha demostrado en otras ocasiones.
¡Ciclón sigue soplando! ya que la Fiesta necesita toreros de tu corte, siempre dispuestos a “bailar con la más fea “ en cuanto a astados se refiere, para dar la verdadera dimensión de esta cruenta fiesta.
A Juan José le conocí personalmente, hace algunos años ya, en la finca “Los Expolios” propiedad del ganadero amigo Eladio Vegas en el término de Rueda la ciudad vinícola vallisoletana. Luego hemos coincidido en numerosas ocasiones: unas en el desempeño de mis funciones de veterinario taurino y otras en tentaderos y eventos. Siempre me trató con simpatía por lo que consiguió mi estima y acrecentó la consideración que siempre le he tenido.
Conozco a su familia, mujer, hijo, padre y hermanos y por todo ello pido a Dios ayuda para que Juan José supere este trance y podamos seguir disfrutando de su persona y de su toreo.
Hoy la complicada corrida de Ana Romero no va a tener crónica pormenorizada general, pues me limitaré a narrar lo acontecido en el toro de la tragedia..
Sale el cuarto de la tarde. Nº 8. “Marqués”. 508 kilos. Cárdeno, coletero del 02/06. Un toro alto y montaíto que desdeña el primer capotazo de saludo de Padilla. ¡Ese tipo de toro que se ven la punta de los pitones y que tanto temen los toreros! por certeros.
Luego…le administra una serie de verónicas sobre ambos pitones. El toro de pronto se queda parado ¡Se orienta! y Juan José lo deja en el capote de uno de sus banderilleros para que lo lleve al burladero de suertes en espera de que los picadores ocupen los lugares reglamentarios.
El encargado de picar es Antonio Calvo el hijo del inolvidable Montoliú, a cuya cabalgadura lleva Padilla el toro con lances por delante sin cruzar. Remiso el toro a entrar al caballo. Cuando se arranca, Montoliú le pica en la paletilla izquierda para rectificar cuando el toro está apretando al peto con la cara alta y en paralelo al caballo.
Lo saca Francisco Javier Rodríguez y se queda con él mientras cambia de puya el picador, para seguidamente, ponerlo él mismo en suerte.
En la segunda entrada, Montoliú se agarra trasero. Lo saca nuevamente Francisco Javier y se cambia el tercio.
En banderillas con la lidia de Francisco Javier Rodríguez auxiliado por Vicente Yesteras, va a poner las banderillas Padilla.
En el primer par, Padilla ha de pasar en falso porque el toro le corta en exceso. En la nueva entrada, a pesar de que el toro le corta mucho, logra poner el par arriba.
El segundo par, con habilidad, lo prende al violín .
El tercer par trata de ponerle comenzando subido en el estribo, pero cuando llega al embroque el toro le corta en demasía y Padilla ha de pasar en falso.
¡El toro presenta excesivas dificultades! ¡Padilla no ve la forma de entrarle con garantías de salir indemne!
Finalmente se va a por el toro, le pone el par con muchísimo riesgo y cuando sale del mismo resbala y se cae delante de la cara del toro que humilla en el momento de pasar por encima del torero y le propina una cornada seca en la parte izquierda del rostro.
Padilla se levanta y se lleva las manos a la cara de la que mana abundante sangre por la orbita ocular.
Es llevado a la enfermería.
Miguel Abellán visiblemente emocionado liquida al toro después de varias entradas en la suerte de matar.
Fotos de la labor general de Padilla en la Corrida de Ana Romero Pilar 2011.
Es mi homenaje al amigo Juan José Padilla.