ANÁLISIS DE LA FERIA TAURINA DE ALGECIRAS 2010.

Por LUIS ALONSO HERNÁNDEZ. Veterinario y escritor.

Hasta esta temporada del 2010 no he estado metido de lleno en el ambiente taurino de Algeciras de ahí que me hayan extrañado algunas cosas.

He conocido a los nuevos empresarios de la plaza de “Las Palomas” al convivir algunas horas con ellos a través de los tentaderos que han celebrado en su finca “la Doctora” y que tuvieron la amabilidad de invitarme. Me causaron una excelente impresión ya que no forman parte de esa jauría empresarial de colmillo retorcido donde prima, por encima de todo condicionamiento, el beneficio económico. Los hermanos Mateo Mateos han tratado en todo momento de levantar la afición taurina de su ciudad, Algeciras.

Me ha dolido que el enorme esfuerzo que han realizado para que sus paisanos pudieran disfrutar de una feria con lo mejor de lo mejor taurinamente hablando (ver carteles ofrecidos) no se haya visto compensado con una afluencia masiva cuando llenar una plaza de 12.000 localidades no debería ser difícil en una comarca del denominado Campo de Gibraltar que cuenta con cerca de 700.000 habitantes.

Los aficionados de Madrid, Sevilla, Málaga, Jerez, San Fernando, El Puerto, La Línea, etc etc han dado la espalda a “la Espaldina SL” uniéndose a los taurinos algecireños, de ahí las paupérrimas entradas que rebasaron por poco la mitad del aforo de una comodísima plaza.

¡Demasiado poco para tanto entusiasmo y exposición pecuniaria como han derrochado los algecireños hermanos Mateo Mateos!

Entre los abonados que nos rodeaban en el tendido 3 allá por la fila 16, hemos oído de todo. Muchas cosas que, de ser ciertas, hay que reconducir para que la empresa que rija “Las Palomas” en futuras ediciones, pueda actuar con ciertas garantías económicas.

Se ha de cumplir el axioma empresarial taurino de: “contar al menos con la mitad del aforo abonado” en nuestro caso 6000 en vez de los 1900 de la presente edición a pesar de las facilidades de pago a plazos y no haber incrementado los precios de la temporada anteriores. Echaban la culpa a que la crisis no ha propiciado la compra de abonos por parte de las empresas para obsequio de sus clientes VIP.¡Dichosa crisis ignorada demasiado tiempo!

También hay que poner freno al abuso del Ayuntamiento en la exigencia de localidades a la empresa (se rumoreaban que 450). Esta petición nos parece leonina cuando no subvenciona y en cambio cobra un canon de ocupación. Los políticos deben “hacer patria” y en este caso quien desee ir a los toros ha de pagar su correspondiente localidad como cualquier hijo de vecino, pues en eso se basa la solidaridad y lucha por elevar la ciudad de su representación.

No nos ha parecido ético preguntar a los amigos empresarios por las pérdidas económicas sufridas, si bien ellos eran conscientes que no ganarían dinero en medio de una crisis económica galopante y con un Mundial de Futbol por medio.

¡La Feria taurina artísticamente pasable! ¡La plaza bonita y cuidadísima! ¡Los detalles de la Empresa “La Espaldina SL” para todos de 10! ¡Como ganaderos también un 10, al presentar una novillada de sus hierro donde sirvieron los 6! ¡La afición merece un 0!

Afición que ha demostrado su desconocimiento del Reglamento Taurino en distintos episodios de las corridas:

-A los toros hay que picarlos pues de contrario son ilidiables.

-A los toros que no embisten no se les puede devolver a chiqueros. Si son mansos hay que lidiarlos con ese inconveniente.

-No secundar a individuos que piden sin conocimiento y sí con intereses creados, el indulto de un toro cuando este animal no cumple ni con mucho el protocolo exigido. Artículo 19 apartado a) donde el presidente tiene la función de conceder el indulto a toros o novillos conforme a los requisitos reglamentarios.

-Exigir un poco más a los toreros en sus faenas, pues se ha pecado de favoritismos.

-Leerse el Reglamento Taurino de Andalucía que con tanto celo llevó a cabo el amigo José Antonio Soriano.

Los asistentes a los toros de Algeciras, en su mayoría necesitan un reciclaje taurino, y éste solo se puede lograr mediante conferencias taurinas en los círculos taurinos de la ciudad durante los fines de semana invernales impartidas por verdaderos conocedores del toro y del toreo, y donde el obsequio de asistencia podía ser ejemplares del Reglamento Taurino Andaluz.

Con estas matizaciones mejoradas, es posible que en próximas ediciones veamos poblada la Plaza de Toros de “Las Palomas” lo que indudablemente dará gloria ver a los asistentes y reconfortará a la empresa para seguir ofreciendo carteles de máxima calidad.